viernes, 11 de septiembre de 2009

DRAMA CD "Aijou Teryouri Funtouki" (La anécdota de la cariñosa batalla de comida casera)

Nota aclaratoria: El siguiente texto es una traducción al español hecha de su original en inglés. Para mayores referencias, consultar la fuente que se cita al final.


CD Drama vol. 1

Aijou Teryouri Funtouki
(La anécdota de la cariñosa batalla de comida casera)
Posteado por keseranpasaran
Traducido por Violet Raven


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Días después de que Shuurei cayera al río, ella está atareada con sus estudios y ocupándose de las tareas de la casa. Ya que el examen se acerca, Shuurei considera reducir sus trabajos de media jornada para concentrarse más en sus estudios. Como Shouka llegará temprano a casa ese día, él sugiere a Shuurei que se enfoque únicamente en estudiar mientras él se encarga de la cena. Aterrorizados, Shuurei y Seiran sugieren a Shouka que desista de esa idea. Sin embargo, Shouka le dice a Shuurei que debería concentrarse más en sus estudios y le recuerda a Seiran que el otro día, él le comentó que deseaba ayudar más a Shuurei. Seiran, dándose cuenta de que Shouka no parecía querer cambiar de opinión, le dice a Shuurei que acepte la oferta de Shouka y que él mismo lo ayudará en la cocina. Shuurei termina por aceptar la oferta.

Al día siguiente, en el palacio, Seiran persigue a Shuuei y le da una lista de ingredientes para que los lleve para la cena. Aunque la lista es bastante larga, Shuuei es incapaz de negarse. Entonces llega Kouyuu y le pregunta a Shuuei si también fue invitado a cenar en casa de Shouka. Shuuei menciona que Seiran también vino a verlo a él, y Kouyuu está algo sorprendido de que también haya invitado a Shuuei, y Shuuei se da cuenta de que Seiran lo escogió a él para llevar los ingredientes para la cena.

Luego Shuuei pregunta si deberían llevar a Ryuuki, ya que Shouka dijo que estaba bien si lo llevaban con ellos. Kouyuu reflexiona y decide que estaría bien que lo llevaran. Después de todo, Ryuuki ha estado trabajando muy duro últimamente, así que debería estar bien…

Peo cuando ellos llegan a la oficina de Ryuuki, se encuentran con un Ryuuki totalmente deprimido, sentado en su escritorio, sin haber hecho absolutamente nada de trabajo ese día. Cuando Kouyuu exige saber por qué no ha hecho nada desde la mañana, Ryuuki les dice que quiere ver a Shuurei, y que ya no puede soportar estar sin verla. Shuuei le dice a Ryuuki que debería disculparse con Kouyuu por no haber hecho sus tareas y que debe terminar su trabajo, pero cuando Kouyuu le pregunta si seguirá insistiendo en ver a Shuurei inmediatamente, Ryuuki responde que no va a trabajar hasta que lo dejen verla. Enojado, Kouyuu le dice que no va a poner un pie fuera de su oficina hasta que haya terminado todo su trabajo y se va de muy mal humor. Shuuei no puede evitar sentir algo de pena por Ryuuki, pero Kouyuu se niega a escuchar.

Cuando Shuuei le pregunta a Kouyuu acerca de la cena de esa noche, Kouyuu le dice que si Ryuuki no ha terminado su trabajo para la hora en que tengan que irse, tendrá que quedarse. Shuuei comenta que Ryuuki no va a ser capaz de terminar a tiempo, pero Kouyuu le dice que no deberían mimarlo tanto. En vez de eso, Kouyuu le dice a Shuuei que no le permita escaparse.

En su oficina, Ryuuki está un poco disgustado por la forma en que se enfadó Kouyuu, pero sigue teniendo muchas ganas de ver a Shuurei. Preguntándose a dónde habrán ido Kouyuu y Shuuei, concluye que lo más probable es que hayan ido a traer más trabajo para él. Viendo los papeles encima de su escritorio, se da cuenta de que éstos están relacionados con la propuesta para permitir a las mujeres que presenten los exámenes, y sus pensamientos de inmediato se trasladan a Shuurei otra vez. Ryuuki entonces decide tomarse un rápido descanso para ir a ver a Shuurei.

Ryuuki sale a escondidas por la ventana, murmurándose a sí mismo acerca de usar la ruta de escape para emergencias… sólo para encontrarse con que alguien le pregunta a dónde iría si la usara. Sorprendido, Ryuuki se encuentra a Shuuei parado frente a él. Cuando le pregunta cuánto tiempo ha estado ahí, Shuuei le responde que llegó poco después de que se salió a escondidas de la oficina. Shuuei le dice a Ryuuki que si regresa discretamente a su oficina y se pone a trabajar, no dirá nada sobre su intento de fuga. Ryuuki acepta regresar en silencio a su oficina.

Ryuuki sigue trabajando bajo el ojo vigilante de Shuuei y entonces Shuuei decide llevar de regreso algunos documentos a los archivos. Antes de irse, Shuuei le dice a Ryuuki que dejará guardias en la puerta y que no intente escaparse. Ryuuki escucha a Shuuei hablar con los guardias y se da cuenta de que los ha dejado justo frente a su puerta. Sin embargo, Ryuuki se niega a rendirse y se escapa por la ventana…

Sin embargo, tan pronto se desliza afuera, los guardias se percatan de ello y dan la alarma. Ryuuki corre mientras los guardias se gritan uno al otro que lo atrapen, ya que la recompensa será que el General Ran les presentará a una mujer. Los guardias tratan de atraer a Ryuuki ofreciéndole algunos manjuus para que salga de su escondite. Ryuuki está esperando a que se vayan los guardias, cuando es encontrado por Kouyuu.

De regreso en la oficina de Ryuuki, Shuuei se percata de que ya casi es hora de que se vayan. Ryuuki está sorprendido al saber que Kouyuu va a salir y Shuuei comenta que no sólo él va a salir, sino también él. Ryuuki sospecha que ellos traman algo, pero antes de que pueda descubrirlo, Shuuei le dice que van a ir a la ciudad y le dice que si quiere mandar una carta para Shuurei, ellos se la entregarán cuando pasen por ahí. Emocionado, Ryuuki alcanza el papel para escribirle una carta a Shuurei.

En casa, Shuurei está ocupada estudiando, cuando se da cuenta de que algo está mal. Preocupada, decide ir a dar un vistazo a Seiran y Shouka. Cuando llega a la cocina, escucha un gran estruendo, ya que Shouka tiró una olla. Cuando Shouka le pregunta si quería tomarse un descanso y beber algo de té, Shuurei admite que había venido a vigilarlos porque estaba un poco preocupada. Mirando a su alrededor, ella se da cuenta de que nadie ha ido a comprar la comida para la cena y se ofrece a ir por ella, pero Shouka le dice que ellos se encargarán de todo. Seiran le pide que no se preocupe, ya que han ordenado que la comida sea entregada y llegará pronto. Shouka saca a Shuurei de la cocina para que regrese a estudiar.

Ryuuki sigue trabajando en su oficina, cuando Shou Taishi entra. Ryuuki le dice a Shou Taishi que se largue a su casa, pero Shou le dice a Ryuuki que si insiste en tratarlo de forma tan fría, las noticias sobre su comportamiento de alguna manera podrían llegar a oídos de Shuurei. Cuando Ryuuki le dice a Shou que si no tiene nada qué hacer, entonces debería irse, Shou recuerda que había venido a entregarle algo. Shou entonces va sacando pergamino tras pergamino y le dice a Ryuuki que tiene que terminarlos para el día siguiente. Sorprendido, Ryuuki sólo puede mirar todo el trabajo que acaba de llegar y se da cuenta de que, literalmente, le tomará toda la noche terminarlo. Ryuuki tenía planeado salirse a escondidas cuando terminara todo su trabajo para ir a visitar a Shuurei y preguntarle sobre la carta, pero ahora no podrá salir.

Camino a casa de Shuurei, Shuuei percibe una extraña presencia que los sigue, pero ya que sólo van a casa de Shouka, no hay razón para que los persigan. Pensando que debió haberse equivocado, él y Kouyuu siguen su camino. Unos cuantos pasos atrás, Reishin los observa con envidia mientras los sigue. Reishin no puede evitar sentir envidia de Kouyuu al haber sido invitado por Shouka a cenar otra vez, cuando él mismo nunca ha sido invitado. Cuando se enteró de que Kouyuu y Shuuei habían estado yendo a cenar ocasionalmente a la casa de Shouka, Reishin tomó la determinación de comprobarlo por sí mismo ese día.

Cuando Kouyuu y Shuuei llegan, Seiran les pregunta por Ryuuki ya que, después de todo, lo tenía contemplado para que lavara los platos… pero Shuuei admite que Ryuuki en esos momentos está ocupado con su trabajo y no pudo ir.

Shuuei mira alrededor y se da cuenta de que Shuurei no está por ahí. Seiran entonces les explica que Shuurei no va a cocinar en esa ocasión, sino que en vez de eso, ellos tendrán que preparar la cena para ella. Sin embargo, cuando están por comenzar a preparar la cena, Shouka los detiene y le grita a Reishin que salga y deje de esconderse. Shuuei se da cuenta de que la presencia que sintió antes, era la de Reishin. Shouka entonces le pregunta a Reishin si le gustaría ayudar a preparar la cena. Seiran, Kouyuu y Shuuei tienen sus dudas acerca de permitir que Shouka o Reishin les ayuden.

Seiran reparte las tareas a cada quién, por lo cual, Kouyuu nuevamente preparará cerdo en jengibre. Seiran le dice que tenga cuidado al prepararlo esta vez, ya que anteriormente le quedó un poco aguado. A Shuuei le corresponde cortar las verduras. A Seiran le tiene sin cuidado si él se corta, siempre y cuando no desperdicie la comida. Después de que Shuuei termine de cortar las verduras, tendrá que calentar el aceite. Seiran le advierte que esté pendiente de que Shouka no se acerque al aceite. A Shouka le corresponde hervir una olla de agua, mientras que Reishin está encargado de hidratar unos hongos secos.

Mientras están cocinando, Shuuei le pregunta a Seiran por qué se les ocurrió la idea de cocinar la cena, en primer lugar. Seiran explica que Shuurei ha estado muy ocupada últimamente con sus estudios, las tareas de la casa y sus trabajos, así que Shouka quería cocinarle la cena esta vez. Aunque originalmente Shouka había pensado en hacerlo él solo, eso no habría resultado bien, así que al último, Shuuei y Kouyuu teminaron involucrándose.

Mientras cocinan, Seiran nota la forma en que Shuuei está pelando los vegetales y le reclama por desperdiciar tanto. Seiran le enseña a Shuuei cómo debe pelarlos, pero Shuuei trata de defenderse diciendo que nunca antes había utilizado un cuchillo de cocina. Seiran, sin embargo, no se traga las excusas de Shuuei, argumentando que, siendo un militar, lo más normal es que Shuuei debería saber manejar una navaja.

Después, Seiran le da a Kouyuu un sartén para cocinar el cerdo con jengibre mientras le dice que aunque el recipiente sea pequeño, debe cuidar que no se derrame. Mientras tanto, Reishin critica la forma en que Kouyuu corta los vegetales y la carne y le exige saber si lo que prepare será comestible. Reishin entonces decide que quiere hacer más que cocinar la comida para Shuurei y le dice a Kouyuu que intercambien lugares. Kouyuu se niega a hacerlo argumentando que Reishin puede resultar herido en el proceso, mientras que Shouka le dice a Reishin que no debería causarles molestias a los demás. Reishin protesta preguntándole a Shouka si no desea hacer algo más por Shuurei que sólo prepararle la cena. Shouka reconoce que si quería hacer algo más, a lo cual los demás entran en pánico al ver que tanto Reishin como Shouka empiezan a mostrar señales de querer hacer algo además de ayudar con la cena.

Sin embargo, Seiran rápidamente se dirige a Reishin para explicarle que si los ingredientes desecados se hidratan de más, podría tener como resultado que pierdan sus propiedades nutritivas y su sabor. Ya que Shuurei lo va a comer, Reishin tiene que ser cuidadoso de no arruinar la comida. Kouyuu y Shuuei están maravillados al ver cómo Seiran maneja a Reishin. Reishin le pregunta a Shouka si eso es verdad, a lo que Shouka responde que no es muy diestro en cuestiones culinarias, pero si Seiran es quien lo dice, debe ser cierto. Además, Shouka admite que a Shuurei le encantan los hongos shiitake. Shuuei comenta acerca de que a Shuurei le gusten los hongos shiitake, mientras Kouyuu se pregunta si en realidad hay alguna comida que a ella no le guste. Seiran reconoce que no hay ningún platillo que no le agrade a Shuurei. Todos están aliviados al ver que Reishin continua hidratando los hongos.

Shouka avisa a Seiran que el agua está hirviendo. Mirando la olla, Seiran le pregunta a Shouka si le agregó algo, a lo que Shouka responde diciendo “agua”. Seiran le pregunta a Shouka por qué está verde el agua. Shuuei y Kouyuu también miran la olla y se preguntan qué le pasó al agua. Como el agua no olía ni sabía raro, él decide seguir cocinando con el agua como está. Seiran empieza a preparar un caldo con el agua y hace que Kouyuu se ocupe de cocinar la carne. Seiran sugiere que terminen de preparar rápido la comida, antes de que a Shouka o a Reishin se les ocurran más ideas.

Después de que terminan de cocinar, Seiran hace que los demás preparen la mesa, mientras él va a buscar a Shuurei.

Shuurei está pensando en cómo les está yendo a su padre y a Seiran con la cena, cuando Seiran la llama a cenar. Shuurei está sorprendida por tanta comida que prepararon y se entera de que tanto Kouyuu como Shuuei ayudaron a preparar la cena. Shuurei menciona que en realidad alguien más seguramente les ayudó a preparar la comida. Cuando Shuurei pregunta esto, Shouka de inmediato interviene diciendo que eso no es importante e invita a todos a sentarse. Seian comenta que Reishin no parece estar preparado para conocer a Shuurei esta vez tampoco y Kouyuu dice que Reishin estaba en un rincón de la cocina practicando cómo presentarse a sí mismo.

Shuurei prueba el cerdo en jengibre y comenta que sabe bastante bueno. Seiran le dice que Kouyuu fue quien lo preparó. Shuurei prueba todos los demás platillos y todos tienen buen sabor, hasta que sólo le queda por probar la sopa. Shuurei trata de adivinar el sabor de la sopa y comenta que aunque su sabor es bueno, es un poco inusual, como si su sabor hubiera sido forzado a cambiar. Shuurei se da cuenta de que inicialmente su padre estaba preparando la sopa hasta que Seiran intervino. Shuurei agradece a todos el que le hayan preparado la cena, pero Shouka dice que ellos están agradecidos con ella porque ella siempre les prepara la cena. Mientras todos se sientan a comer, Kouyuu prueba la sopa y dice que realmente sabe rara. Shuuei sólo puede admirar el valor de Kouyuu para decir eso.

Mientras comen, Shuurei se percata de que ellos cocinaron hongos shiitake y entonces se escucha un sonido de la cocina. Seiran distrae a Shuurei preguntándole si hay algo malo con los hongos. Shuurei le responde que quedaron muy bien con la sopa y que tienen buen sabor. Otro sonido se escucha en la cocina y Shuurei se pegunta si algo se habrá caído ahí, pero Seiran le dice que él irá a echar un vistazo después. Todos siguen comiendo, y Shuurei les dice que está muy contenta porque ellos le hicieron la cena. Shouka se ofrece a hacerlo todas las veces que él regrese temprano de trabajar, pero Shuurei le dice que aunque está muy contenta por eso, ella seguirá haciendo de cenar. Shuurei se da cuenta de que realmente disfruta preparar la cena para todos. Kouyuu comenta que se sentirá mucho más aliviado al comer sabiendo que Shuurei ha preparado la cena.

Shuuei recuerda la carta que Ryuuki escribió para Shuurei y se la entrega. Shuurei le da las gracias por entregarle la carta y le pide que envíe sus saludos a Ryuuki.

Después de cenar, Shouka le dice a Shusui que el clima estaba enfriando esa noche. Shouka le pregunta a Shusui si quiere algo de sopa. Aparentemente, todavía quedaba algo de sopa después de la cena. Shusui alegremente acepta. Shusui le pregunta a Shouka por qué decidió hacer la cena para Shuurei y él responde que fue porque deseaba hacer algo por Shuurei. Shusui comenta que Shouka se ve realmente feliz, y houka admite que hacer cosas así por su hija realmente lo hace feliz. Shusui prueba la sopa y dice que sabe muy bien. Shouka confiesa que en su mayoría, fue Seiran quien preparó la sopa, pero Shusui dice que eso no cambia el hecho de que él haya ayudado a prepararla y que ésta tiene un delicado y maravilloso sabor. Shouka se da cuenta de que mientras preparaba la cena para Shuurei, el ambiente era muy tranquilo. Shouka se pregunta si últimamente ha estado demasiado contento, pero Shusui niega esto y admite que a veces ella también se siente muy contenta.

Cuando Shuuei y Kouyuu llegan a la oficina de Ryuuki a la mañana siguiente, son recibidos por un malhumorado Ryuuki. Ryuuki les pregunta si se divirtieron anoche. Al parecer, Shou Taishi le informó de que habían ido a cenar con Shouka, Seiran y Shuurei la noche anterior. Rápidamente, Shuuei le explica que como sus consejeros, habría sido inapropiado llevarlo con ellos a cenar cuando tienen tanto trabajo, pero Ryuuki se pregunta si no es más inapropiado que sus consejeros se hayan ido a cenar y divertir sin él. Ryuuki se lamenta por lo injustos que son ellos con él, pero Kouyuu dice que se lo merece. Shuuei distrae a Ryuuki diciéndole que le entregó su carta a Shuurei. La cara de Ryuuki cambia rápidamente ante esto y está feliz de que Shuurei recibiera su carta y la leyera. Ryuuki se sienta a trabajar y dice que desearía poder ver a Shuurei.

Cuando Ryuuki termina su trabajo, se da cuenta de que Kouyuu y Shuuei están tardando mucho en regresar, preguntándose si Kouyuu se perdió otra vez. Seiran entra y le entrega un pequeño paquete y le dice que Shuurei preparó algunos manjuus. Ryuuki le dice que se los comerá en seguida y Seiran lo acompaña tomando té mientras él se come los majuus. Seiran le dice a Ryuuki que le va a decir a Shuurei que le gustaron los manjuus. Ryuuki le pide que le diga que espera que vuelva a preparar más para él. Seiran entonces se retira para regresar a trabajar. Ryuuki piensa en el manjuu que se acaba de comer y dado su sabor, se pregunta si Shuurei no sentirá lo mismo que él y que ella también quiere verlo. Ryuuki le escribe una carta breve a Shouka diciéndole que irá a visitarlos por la tarde dos días después, cuando Kouyuu regrese. Ocultando rápidamente la carta, Ryuuki le entrega a Kouyuu sus correcciones. Ryuuki decide que más tarde enviará a alguien a entregarle la carta a Shouka.

Dos noches más tarde, Ryuuki sale a hurtadillas para ir a casa de Shouka, sólo para encontrarse con que la puerta está cerrada y no hay nadie. Deslizándose al jardín, encontrando que no hay nadie en la cocina y se dirige hacia el cuarto de Shuurei pensando que ella podría estar ahí estudiando. Al ver la ventana abierta, él se cuela hacia adentro y descubre que ella está tomando una siesta en su cama. Ryuuki la cubre con las mantas y Shuurei murmura el nombre de Seiran entre sueños. Al principio, Ryuuki se pregunta si la habrá despertado, pero luego se da cuenta de que ella solamente está hablando dormida. Ryuuki comenta que le gustaría ser incluido en su sueño junto con Seiran. Shuurei atrapa la mano de Ryuuki mientras está dormida y termina tirándolo en la cama. Ryuuki se las arregla para evitar caer sobre Shuurei. Ryuuki sólo puede pensar en lo cerca que está ahora de ella cuando duerme, y que ya antes han dormido juntos en la misma cama. Mientras Shuurei sigue murmurando dormida, Ryuuki se pregunta si sería incorrecto que la besara en la mejilla. Sin embargo, cuando está a punto de besarla, Shuurei empieza a gritar acerca de no dejar ir a su amado… ¡arroz! Sorprendido, Ryuuki sólo puede exigirle saber qué quiso decir acerca del arroz para despertarse. Impresionada, Shuurei grita y Ryuuki trata de tranquilizarla antes de que alguien venga y los encuentre así. Sin embargo, Seiran, Shouka, Kouyuu y Shuuei llegan corriendo ante los gritos de Shuurei y encuentran a Ryuuki encima de Shuurei en la cama.

Seiran y Shuuei le dicen a Ryuuki que ya habían sospechado que estaba intentando hacerle algo perjudicial a Shuurei días antes y que ahora no les quedaba duda de sus intenciones. Shuuei menciona la extraña carta que Ryuuki escribió y éste sólo puede preguntarse cómo es que lo supo. Kouyuu le dice que la encontraron debajo de su escritorio momentos antes, y que por eso habían venido a investigar. Ryuuki entonces se da cuenta de que después de que escondió la carta, se olvidó de ella por completo y ésta nunca fue entregada. Enojados, Seiran y Shouka le dicen que hay algunas cosas que son imperdonables y que Ryuuki intenta disculparse diciendo que todo fue un malentendido. Ambos acechan la cama y Ryuuki solamente puede gritar pidiendo ayuda.

Shuurei prepara la cena para todos y se sientan a comer. Un deprimido Ryuuki se sienta a la mesa y Seiran le pregunta si no le gusta lo que hay de cenar. Ryuuki dice que el arroz está muy bueno, pero se queja de que no pueda probar ningún otro platillo como castigo por haberse colado al dormitorio y a la cama de Shuurei –después de todo, también Shuurei tiene algo de culpa por haberlo tirado en la cama mientras dormía. Seiran le pregunta si eso quiere decir entonces que Shuurei tuvo toda la culpa, pero Ryuuki dice que no es así, ya que de todas formas, él no hubiera hecho nada incorrecto. Shuurei le dice que estuvo mal que haya entrado a su cuarto sin permiso, pero Ryuuki se defiende diciendo que no quería que ella se resfriara, ya que no estaba cubierta con las cobijas. Shuurei le dice que entonces tenía que haberla despertado desde afuera del cuarto y que también está mal que ande merodeando en los jardines de las demás personas. Ryuuki se disculpa diciendo que la próxima vez, esperará frente a la casa. Shuurei le dice que también debe asegurarse de enviar una carta antes para anunciar su visita. A Shuurei le parece inaceptable que el Emperador se quede esperando frente a la casa de alguien o que entre por la ventana. Ryuuki se disculpa otra vez y promete que la próxima vez mandará antes una carta. Satisfecha con esto, Shuurei dice que Ryuuki puede cenar y que también ha preparado algunos manjuus. Los demás observan a Ryuuki en éxtasis y no pueden evitar compararlos con un perro y su amo.

Después de cenar, Shuurei le comenta a Seiran y a su padre que la cena estuvo muy animada. Seiran se pregunta si es porque Ryuuki estuvo ahí. Los tres disfrutan juntos de la tarde pacífica por un rato, y después Shouka se retira. Shuurei le dice a Seiran que a veces desea que ése lujo de invitar a sus amigos a cenar para luego disfrutar de una tarde tranquila, continúe siempre así, pero que eso no es posible. Si sus posiciones cambiaran, o si se hicieran viejos, la situación no sería igual… y que ella tampoco puede quedarse tal cual para siempre. Seiran dice que ella está cambiando y que pronto será un oficial y que todos la están apoyando, al igual que él. Shuurei dice que hará su mejor esfuerzo en el examen y que espera que cuando las vidas de todos hayan cambiado un poco, de nuevo puedan disfrutar de una tarde como esta, y también espera que los sentimientos que experimente esa vez, sean iguales a los de ahora.

En casa de Kijin, Reishin le está contando su experiencia al preparar la cena para Shuurei. Kijin dice que debió ser grandioso, pero Reishin lo niega. Después de todo, Reishin no pudo cenar con Shouka y Shuurei, mientras que los demás si pudieron compartir la mesa con ellos. Kijin desestima los argumentos de Reishin diciendo que fue su culpa por esconderse en la cocina y que de todas formas, ni siquiera pudo hacer ningún progreso desde su última visita. Reishin irritado, le relata cómo es que Kouyuu pidió una segunda ración de la sopa de Shouka, lo que le provocó envidia por cómo se entretuvo conversando con Shuurei… La frustración de Reishin se hace presente mientras recuerda la reacción de Shuurei al recibir la carta de Ryuuki. Reishin anhelaba poder sentarse a la mesa con Shouka y Shuurei, que Shouka le pasara la comida como lo hizo con Kouyuu, además de que deseaba que Shuurei lo alabara directamente a él por los hongos shiitake. Confundido, Kijin le pregunta qué pasa con los hongos shiitake. Reishin le cuenta a Kijin cómo es que Shuurei elogió los hongos que él había hidratado. Kijin dice que Reishin ha pasado de ser una lata a ser patético. Reishin lo ignora y pasa a relatar cómo fue que Shuurei elogió sus hongos y sonrió. Reishin dice que Kijin está celoso porque Shuurei alabó su manera de cocinar. Kijin se pregunta desde cuando a Reishin se le ha pasado por la cabeza no llamarlo por su nombre. Kijin sigue diciéndole que todo lo que hizo fue poner los hongos desecados en agua y que Shuurei ni siquiera se enteró de que fue él, pero Reishin se niega a considerar algo más que la sonrisa de Shuurei y sus palabras, como si se las hubiera dedicado directamente a él. Kijin se arrepiente de haber dejado entrar a Reishin a su casa para tomar una copa, y pide que se apure a beber, que se emborrache y se vaya a casa. Reishin dice que le va a contar los detalles de esa tarde, y Kijin se pregunta por qué no puede tener una tarde tranquila.


Fuente: http://kagedreams.livejournal.com/92085.html#cutid1

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2 comentarios:

  1. Ne divertí demasiado!! De sólo imaginar el monólogo de Reishin para presentarse jajaja. Me encanta qué cada personaje sea único y diferente y qué eso ayude a darle una buena trama a todas las historias!

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  2. Ne divertí demasiado!! De sólo imaginar el monólogo de Reishin para presentarse jajaja. Me encanta qué cada personaje sea único y diferente y qué eso ayude a darle una buena trama a todas las historias!

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