Nota aclaratoria: El siguiente texto es una traducción al español hecha de su original en inglés. Para mayores referencias, consultar la fuente que se cita al final.
-- Esta historia es de cuando Shuurei acababa de entrar al palacio como concubina, y ella y el emperador se conocieron, sin revelar sus verdaderas posiciones…
La lluvia de primavera caía.
Cuando Shuurei iba caminando rumbo a los archivos como era usual, probablemente a causa de la lluvia, una pequeña rana de lluvia saltó fuera del estanque. Por alguna razón, iba saltando detrás de Shuurei.
Las ranas grandes son repugnantes, pero a ella no le desagradaban las pequeñas ranas de lluvia. Shuurei se dio vuelta, la puso en su palma y la devolvió al estanque.
“Vamos, ve a casa. Si saltas por ahí, te van a pisar y te aplastarán.”
Shuurei le dijo adiós a la rana, y se apresuró hacia los archivos.
“Ah, qué raro. Llegué primero.”
Al entrar a los archivos, Shuurei estaba sorprendida. El día anterior, y el día anterior a ése, sin importar lo temprano que Shuurei se levantara, el “General Ran” siempre se le adelantaba. No era posible que estuviera durmiendo en los archivos.
Incluso su padre, el encargado de los archivos, parecía haber salido a algún lado. Ella cruzó los brazos, preguntándose qué hacer.
Shuurei se acercó al estante, tomó algunos de sus libros preferidos en sus manos, y fue a la parte trasera para que nadie la interrumpiera, y decidió en secreto, leer mientras oía la lluvia.
***
“Ran Shuuei”, es decir, el emperador de Saiunkoku, Shi Ryuuki, despertó con el sonido de la lluvia. Por un momento, Ryuuki no supo dónde estaba.
(Oh, es mi dormitorio…)
Recientemente, había estado durmiendo en los archivos, así que había pasado un tiempo desde la última vez que despertó en su propia recámara.
“Actualmente estás durmiendo en tu propia recámara, ¿verdad?”
Claramente, Shuurei le preguntó esto el día anterior, pero Ryuuki realmente no entendió por qué eso lo hizo dormir en su propio dormitorio.
Levantarse y escuchar el sonido de la lluvia solo, lo hacía sentirse extremadamente solitario. Él utilizaba mucha iluminación pero, ¿por qué pensó en dormir solo? Ryuuki retorció su cuello, mientras contemplaba. –En realidad, desde hace mucho tiempo, debería estar acostumbrado a estar solo. Y pensándolo ahora, realmente no tenía ganas de llamar a nadie.
(¿Quién…?)
Shuurei, a quien conoció bajo el árbol de cerezo, apareció en su cabeza. ‘Me pregunto si ya estará en los archivos. Quizás se haya ido, ya que no estoy ahí.’
Pensando en eso, repentinamente no pudo soportarlo. Ryuuki, a toda prisa, se vistió al azar, y rápidamente se dirigió hacia los archivos.
Por las mañanas, los archivos estaban en silencio, sólo el sonido de la lluvia resonaba suavemente.
(Ni Shuurei… ni Shouka están aquí…)
Ryuuki estaba algo triste, mientras se dirigía a los estantes. Inesperadamente, encontró a Shuurei en la parte trasera del lugar, y se sobresaltó.
“Shuu…”
Empezó a decir su nombre, y cerró la boca.
Shuurei estaba inclinada sobre el estante, y durmiendo con una suave respiración. Algunos libros se desparramaron en el piso, y tenía un libro delgado al alcance de su mano, que apenas si estaba abierto al engancharse de la punta de su dedo.
Ryuuki se acercó cuidadosamente a Shuurei. Ella estaba profundamente dormida. Él se sentó junto a ella, sin ninguna razón. Escuchando su profunda respiración, su corazón se empezó a sentir cómodo. Era como si el vacío fuera llenado.
Él quería escuchar su respiración un poco más cerca, así que audazmente acortó su distancia con Shuurei poco a poco. De pronto, el cuerpo de Shuurei perdió el equilibrio, y se reclinó sobre el hombro de Ryuuki.
“¡!”
Él miró a Shuurei, pero por suerte, no había señales de que se hubiera despertado. Aliviado, tomó el libro que seguía enganchado al dedo de Shuurei.
Los otros libros eran de historia y leyes, temas bastante difíciles, pero ése era extrañamente delgado.
“¿Cuentos de hadas…?”
‘Pensándolo bien, tengo la sensación de haber leído éste libro en el pasado.’ Hojeándolo, sus ojos se toparon con la historia del hagoromo de la doncella celestial (una especie de chal que permite volar a las doncellas celestiales)
(El hagoromo de la doncella celestial)
La historia trataba de un hombre pobre que, al enamorarse de una doncella celestial, le robó su hagoromo. El hombre uso esto como pretexto para hacer a la doncella celestial su esposa, tuvieron un hijo, y vivían felices, pero cierto día, la doncella celestial encontró el hagoromo robado, y abandonó al hombre y a su hijo para regresar al cielo---
(Una doncella celestial)
‘Ellos vivían felices pero, ¿por qué en cuanto ella encontró el hagoromo, fácilmente hizo todo a un lado para regresar al cielo?’, él recordaba haberle dicho eso airadamente a Shouka.
(Esa vez, ¿cómo respondió Shouka…?)
Al girar su cuello, Ryuuki miró a Shuurei durmiendo. Shuurei siempre vestía ropas hermosas, y con frecuencia llevaba una prenda vaporosa ondeando de su brazo.
Ryuuki frunció el ceño. Él tenía la sensación de que esa cosa ondeante era casi igual al hagoromo de la doncella celestial.
(¿Y si ella se iba volando?)
Por primera vez, Ryuuki consideró esa posibilidad.
Ellos tomaban el té todos los días, pero él no sabía cuándo Shuurei dejaría de venir. Ella es la hija de Shouka, y era obvio que tenía un hogar al qué regresar. Aunque trabajaba en el palacio, ella estaba en edad de merecer. Si tuviera una propuesta de matrimonio, probablemente se iría de inmediato. Ryuuki no tenía ninguna relación con Shuurei, así que sería extraño retenerla.
(Pensar en eso--)
Shuurei dijo que tenía un asunto que tratar con “el emperador”, cuando se conocieron. Es por eso que ella quería verlo---
(---Si me reuniera con ella como “el emperador”---)
‘Me pregunto si algo cambiaría.’
Cuando él tiró del “hagoromo”, el cuerpo de Shuurei se inclinó aún más. Ryuuki rápidamente la abrazó, y luego de pensarlo un momento, cuidadosamente bajó la pequeña cabeza de Shuurei hasta su regazo… Era la primera vez que él le prestaba su regazo a una mujer para usarlo de almohada.
La calidez sobre su regazo se sentía bien. Tan bien que quería hacer esto y mirar su rostro durmiente para siempre.
Ryuuki miró fijamente el rostro dormido de Shuurei. Definitivamente la apariencia de ella era común, pero a Ryuuki le gustaba. Él recogió su largo y suelto cabello negro con las puntas de sus dedos. Sin perder interés, él entrelazó su cabello alrededor de sus dedos una y otra vez.
Eventualmente, tocó su mejilla, trazó con su dedo desde la sien hasta el lóbulo de su oreja, continuando con la línea de su barbilla. Él usó su pulgar para trazar lentamente sus ligeramente separados labios.
De pronto, Ryuuki pensó en lo agradable que habría sido si ella hubiera estado junto a él la noche anterior.
Si ése hubiera sido el caso, él no habría estado solo, y sin duda, no habría ansiado tanto levantarse. Él no sabía por qué, pero de alguna forma, así se sentía.
Doblar su cuello fue un acto inconsciente. Quizás fue atraído por su respiración al dormir. Él cerró los ojos, como si estuviera siendo jalado por los labios abiertos de Shuurei. Justo cuando los labios de ambos casi se tocaban.
Algo se pegó a la mejilla de Ryuuki.
“¡¿Q-q-qué!?”
Cuando Ryuuki levantó la cara, una pequeña y verde rana saltó alejándose.
“… Umm, ¿Qué…?”
Con la conmoción, Shuurei despertó.
Habiendo estado a punto de hacer algo malo, Ryuuki se asustó, y dirigió su enojo por haber sido interrumpido, hacia la rana.
“¡¿Qué te pasa, rana?! ¡¿Cómo te atreves?!”
“¿Huh? Oh, tal vez es la rana de antes. Te dije que fueras a casa.”
Shuurei aún estaba medio dormida, así que no se dio cuenta de la posición en la que estaba durmiendo.
Ryuuki estaba furioso. ¡Por una rana!
“Ya sé lo que pasa. ¡A esa rana le gusta Shuurei y estaba celosa de mí!”
“¿Huh? ¿Qué estás…? ¡Oye, deja de molestarla! ¡¿No te da lástima?!”
“¡Shuurei prefiere a la rana que a mí!”
“Claro. Si eres amable con una rana, quizás ésta se convierta en un apuesto príncipe que venga por ti. Es normal en los cuentos de hadas.”
¡¿Príncipe?! Ryuuki solía ser un príncipe, y ahora era el emperador.
“Un príncipe no significa nada cuando tienes frente a tus ojos---“
Al ser observado fijamente por Shuurei, Ryuuki se congeló.
“… no, nada…”
“… oh, ya veo…”
Shuurei se limitó a murmurar sólo eso. Puso la rana en su palma, y salió hacia la terraza. Ryuuki la siguió, pero Shuurei no le dirigió la palabra.
Cuando llegaron afuera, la lluvia ya había cesado. Shuurei dejó ir a la rana, y entonces alzó la vista hacia el cielo.
Una brisa sopló, y el “hagoromo” de Shuurei revoloteó. Parecía como si pudiera alzar el vuelo, así que Ryuuki no pudo evitar agarrar la punta del lienzo.
Cuando Shuurei volteó, Ryuuki decidió preguntarle algo
“… Shuu-Shuurei, ¿por qué crees que la doncella celestial hizo a un lado su felicidad, y regresó al cielo?”
“Porque él le mintió. Él dijo no saber nada del hagoromo. Mentir y así obtener la felicidad a cambio de algo que es importante para alguien más, no es verdadera felicidad.”
Ryuuki bajó la cabeza.
“¿Qué harías si no puedes ver al emperador?”
“Me iría a casa. Eso fue lo que acordamos.”
Shuurei era una doncella celestial. Para Ryuuki, eso es lo que ella era exactamente. Ryuuki cerró los ojos.
Si él pudiera guardar la felicidad que sentía mientras estaban juntos, dentro de la palma de su mano indefinidamente, o no-
“…¿Te quedarás aquí un poco más de tiempo?”
“Si. Lo intentaré un poco más.”
‘Entiendo’, farfulló Ryuuki.
Cuando levantaron la vista, había un hermoso arco iris.
Al día siguiente, el emperador se presentó con Shuurei como “Shi Ryuuki”.
Fuente: http://wanlily.livejournal.com/1217.html
***
> Temas Relacionados - Volumen 1 (Resúmen)
*’Hagoromo’ según el cuento de ‘Hanabata’ es una tela que usaba la doncella celestial que descendió a la tierra, y éste le servía para volar. Si desean saber más acerca de éste cuento aquí está el link:
http://launidadmorelos.blogspot.com/2009/03/un-cuento-japones-tanabata.html
Saiunkoku Monogatari mini novela
Tennyo no Hagoromo
(El Hagoromo de la doncella celestial)*
Por Yukino Sai
Posteado por wanlily
Traducido por Violet Raven
Tennyo no Hagoromo
(El Hagoromo de la doncella celestial)*
Por Yukino Sai
Posteado por wanlily
Traducido por Violet Raven
-- Esta historia es de cuando Shuurei acababa de entrar al palacio como concubina, y ella y el emperador se conocieron, sin revelar sus verdaderas posiciones…
La lluvia de primavera caía.
Cuando Shuurei iba caminando rumbo a los archivos como era usual, probablemente a causa de la lluvia, una pequeña rana de lluvia saltó fuera del estanque. Por alguna razón, iba saltando detrás de Shuurei.
Las ranas grandes son repugnantes, pero a ella no le desagradaban las pequeñas ranas de lluvia. Shuurei se dio vuelta, la puso en su palma y la devolvió al estanque.
“Vamos, ve a casa. Si saltas por ahí, te van a pisar y te aplastarán.”
Shuurei le dijo adiós a la rana, y se apresuró hacia los archivos.
“Ah, qué raro. Llegué primero.”
Al entrar a los archivos, Shuurei estaba sorprendida. El día anterior, y el día anterior a ése, sin importar lo temprano que Shuurei se levantara, el “General Ran” siempre se le adelantaba. No era posible que estuviera durmiendo en los archivos.
Incluso su padre, el encargado de los archivos, parecía haber salido a algún lado. Ella cruzó los brazos, preguntándose qué hacer.
Shuurei se acercó al estante, tomó algunos de sus libros preferidos en sus manos, y fue a la parte trasera para que nadie la interrumpiera, y decidió en secreto, leer mientras oía la lluvia.
***
“Ran Shuuei”, es decir, el emperador de Saiunkoku, Shi Ryuuki, despertó con el sonido de la lluvia. Por un momento, Ryuuki no supo dónde estaba.
(Oh, es mi dormitorio…)
Recientemente, había estado durmiendo en los archivos, así que había pasado un tiempo desde la última vez que despertó en su propia recámara.
“Actualmente estás durmiendo en tu propia recámara, ¿verdad?”
Claramente, Shuurei le preguntó esto el día anterior, pero Ryuuki realmente no entendió por qué eso lo hizo dormir en su propio dormitorio.
Levantarse y escuchar el sonido de la lluvia solo, lo hacía sentirse extremadamente solitario. Él utilizaba mucha iluminación pero, ¿por qué pensó en dormir solo? Ryuuki retorció su cuello, mientras contemplaba. –En realidad, desde hace mucho tiempo, debería estar acostumbrado a estar solo. Y pensándolo ahora, realmente no tenía ganas de llamar a nadie.
(¿Quién…?)
Shuurei, a quien conoció bajo el árbol de cerezo, apareció en su cabeza. ‘Me pregunto si ya estará en los archivos. Quizás se haya ido, ya que no estoy ahí.’
Pensando en eso, repentinamente no pudo soportarlo. Ryuuki, a toda prisa, se vistió al azar, y rápidamente se dirigió hacia los archivos.
Por las mañanas, los archivos estaban en silencio, sólo el sonido de la lluvia resonaba suavemente.
(Ni Shuurei… ni Shouka están aquí…)
Ryuuki estaba algo triste, mientras se dirigía a los estantes. Inesperadamente, encontró a Shuurei en la parte trasera del lugar, y se sobresaltó.
“Shuu…”
Empezó a decir su nombre, y cerró la boca.
Shuurei estaba inclinada sobre el estante, y durmiendo con una suave respiración. Algunos libros se desparramaron en el piso, y tenía un libro delgado al alcance de su mano, que apenas si estaba abierto al engancharse de la punta de su dedo.
Ryuuki se acercó cuidadosamente a Shuurei. Ella estaba profundamente dormida. Él se sentó junto a ella, sin ninguna razón. Escuchando su profunda respiración, su corazón se empezó a sentir cómodo. Era como si el vacío fuera llenado.
Él quería escuchar su respiración un poco más cerca, así que audazmente acortó su distancia con Shuurei poco a poco. De pronto, el cuerpo de Shuurei perdió el equilibrio, y se reclinó sobre el hombro de Ryuuki.
“¡!”
Él miró a Shuurei, pero por suerte, no había señales de que se hubiera despertado. Aliviado, tomó el libro que seguía enganchado al dedo de Shuurei.
Los otros libros eran de historia y leyes, temas bastante difíciles, pero ése era extrañamente delgado.
“¿Cuentos de hadas…?”
‘Pensándolo bien, tengo la sensación de haber leído éste libro en el pasado.’ Hojeándolo, sus ojos se toparon con la historia del hagoromo de la doncella celestial (una especie de chal que permite volar a las doncellas celestiales)
(El hagoromo de la doncella celestial)
La historia trataba de un hombre pobre que, al enamorarse de una doncella celestial, le robó su hagoromo. El hombre uso esto como pretexto para hacer a la doncella celestial su esposa, tuvieron un hijo, y vivían felices, pero cierto día, la doncella celestial encontró el hagoromo robado, y abandonó al hombre y a su hijo para regresar al cielo---
(Una doncella celestial)
‘Ellos vivían felices pero, ¿por qué en cuanto ella encontró el hagoromo, fácilmente hizo todo a un lado para regresar al cielo?’, él recordaba haberle dicho eso airadamente a Shouka.
(Esa vez, ¿cómo respondió Shouka…?)
Al girar su cuello, Ryuuki miró a Shuurei durmiendo. Shuurei siempre vestía ropas hermosas, y con frecuencia llevaba una prenda vaporosa ondeando de su brazo.
Ryuuki frunció el ceño. Él tenía la sensación de que esa cosa ondeante era casi igual al hagoromo de la doncella celestial.
(¿Y si ella se iba volando?)
Por primera vez, Ryuuki consideró esa posibilidad.
Ellos tomaban el té todos los días, pero él no sabía cuándo Shuurei dejaría de venir. Ella es la hija de Shouka, y era obvio que tenía un hogar al qué regresar. Aunque trabajaba en el palacio, ella estaba en edad de merecer. Si tuviera una propuesta de matrimonio, probablemente se iría de inmediato. Ryuuki no tenía ninguna relación con Shuurei, así que sería extraño retenerla.
(Pensar en eso--)
Shuurei dijo que tenía un asunto que tratar con “el emperador”, cuando se conocieron. Es por eso que ella quería verlo---
(---Si me reuniera con ella como “el emperador”---)
‘Me pregunto si algo cambiaría.’
Cuando él tiró del “hagoromo”, el cuerpo de Shuurei se inclinó aún más. Ryuuki rápidamente la abrazó, y luego de pensarlo un momento, cuidadosamente bajó la pequeña cabeza de Shuurei hasta su regazo… Era la primera vez que él le prestaba su regazo a una mujer para usarlo de almohada.
La calidez sobre su regazo se sentía bien. Tan bien que quería hacer esto y mirar su rostro durmiente para siempre.
Ryuuki miró fijamente el rostro dormido de Shuurei. Definitivamente la apariencia de ella era común, pero a Ryuuki le gustaba. Él recogió su largo y suelto cabello negro con las puntas de sus dedos. Sin perder interés, él entrelazó su cabello alrededor de sus dedos una y otra vez.
Eventualmente, tocó su mejilla, trazó con su dedo desde la sien hasta el lóbulo de su oreja, continuando con la línea de su barbilla. Él usó su pulgar para trazar lentamente sus ligeramente separados labios.
De pronto, Ryuuki pensó en lo agradable que habría sido si ella hubiera estado junto a él la noche anterior.
Si ése hubiera sido el caso, él no habría estado solo, y sin duda, no habría ansiado tanto levantarse. Él no sabía por qué, pero de alguna forma, así se sentía.
Doblar su cuello fue un acto inconsciente. Quizás fue atraído por su respiración al dormir. Él cerró los ojos, como si estuviera siendo jalado por los labios abiertos de Shuurei. Justo cuando los labios de ambos casi se tocaban.
Algo se pegó a la mejilla de Ryuuki.
“¡¿Q-q-qué!?”
Cuando Ryuuki levantó la cara, una pequeña y verde rana saltó alejándose.
“… Umm, ¿Qué…?”
Con la conmoción, Shuurei despertó.
Habiendo estado a punto de hacer algo malo, Ryuuki se asustó, y dirigió su enojo por haber sido interrumpido, hacia la rana.
“¡¿Qué te pasa, rana?! ¡¿Cómo te atreves?!”
“¿Huh? Oh, tal vez es la rana de antes. Te dije que fueras a casa.”
Shuurei aún estaba medio dormida, así que no se dio cuenta de la posición en la que estaba durmiendo.
Ryuuki estaba furioso. ¡Por una rana!
“Ya sé lo que pasa. ¡A esa rana le gusta Shuurei y estaba celosa de mí!”
“¿Huh? ¿Qué estás…? ¡Oye, deja de molestarla! ¡¿No te da lástima?!”
“¡Shuurei prefiere a la rana que a mí!”
“Claro. Si eres amable con una rana, quizás ésta se convierta en un apuesto príncipe que venga por ti. Es normal en los cuentos de hadas.”
¡¿Príncipe?! Ryuuki solía ser un príncipe, y ahora era el emperador.
“Un príncipe no significa nada cuando tienes frente a tus ojos---“
Al ser observado fijamente por Shuurei, Ryuuki se congeló.
“… no, nada…”
“… oh, ya veo…”
Shuurei se limitó a murmurar sólo eso. Puso la rana en su palma, y salió hacia la terraza. Ryuuki la siguió, pero Shuurei no le dirigió la palabra.
Cuando llegaron afuera, la lluvia ya había cesado. Shuurei dejó ir a la rana, y entonces alzó la vista hacia el cielo.
Una brisa sopló, y el “hagoromo” de Shuurei revoloteó. Parecía como si pudiera alzar el vuelo, así que Ryuuki no pudo evitar agarrar la punta del lienzo.
Cuando Shuurei volteó, Ryuuki decidió preguntarle algo
“… Shuu-Shuurei, ¿por qué crees que la doncella celestial hizo a un lado su felicidad, y regresó al cielo?”
“Porque él le mintió. Él dijo no saber nada del hagoromo. Mentir y así obtener la felicidad a cambio de algo que es importante para alguien más, no es verdadera felicidad.”
Ryuuki bajó la cabeza.
“¿Qué harías si no puedes ver al emperador?”
“Me iría a casa. Eso fue lo que acordamos.”
Shuurei era una doncella celestial. Para Ryuuki, eso es lo que ella era exactamente. Ryuuki cerró los ojos.
Si él pudiera guardar la felicidad que sentía mientras estaban juntos, dentro de la palma de su mano indefinidamente, o no-
“…¿Te quedarás aquí un poco más de tiempo?”
“Si. Lo intentaré un poco más.”
‘Entiendo’, farfulló Ryuuki.
Cuando levantaron la vista, había un hermoso arco iris.
Al día siguiente, el emperador se presentó con Shuurei como “Shi Ryuuki”.
Fuente: http://wanlily.livejournal.com/1217.html
***
> Temas Relacionados - Volumen 1 (Resúmen)
*’Hagoromo’ según el cuento de ‘Hanabata’ es una tela que usaba la doncella celestial que descendió a la tierra, y éste le servía para volar. Si desean saber más acerca de éste cuento aquí está el link:
http://launidadmorelos.blogspot.com/2009/03/un-cuento-japones-tanabata.html
lo de la doncella celestial me hace acordar a ayashi no ceres xD
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