GAIDEN 3 (Otogibanashi no Hajimari) Parte 2

Nota aclaratoria: El siguiente texto es una traducción al español hecha de su original en inglés. Para mayores referencias, consultar la fuente que se cita al final.

SAIUNKOKU GAIDEN 3
Otogibanashi no Hajimari
(El principio del cuento de hadas)
Posteado por Charmian
Traducido por Violet Raven
(Parte 2)

> PRIMERA PARTE

'“Shouka-sama…”

Después de que él puso a Reishin en la cama de la sala de descanso, Shusui despertó en la cama al otro lado del cuarto. Cuando volvió completamente en sí, sus ojos estaban claros, siendo que antes estaban vacíos.

Shouka miró a Shusui, y estaba visiblemente aliviado.
“¿Te duele algo?”
“No…”
“Estoy haciendo una sopa medicinal. Cuando la traiga, come algo.”
“No… ya me siento mejor.”
“Entonces, cómela en la mesa.”

La mente de Shusui, que seguía un tanto vaga, se aclaró al instante y se congeló ante la voz de Shouka, que era tierna, pero que aún así no le preguntó si quería o no.

(Está… enojado.)

Shusui palideció porque había pasado tanto tiempo, que había olvidado cómo lidiar con esto. Hokuto-nii más que hacerlo enojar, habría estado enfadado, y Okukata-sama (refiriéndose a la esposa de Shouka) habría iniciado la batalla, sin dar un paso atrás, pero Shusui no podía hacer eso. Mientras ella pensaba una y otra vez qué hacer, antes de saberlo, había una manta la envolviéndola y estaba sorbiendo la sopa.

Aunque su cuerpo seguía tan pesado como el plomo, la sopa medicinal de Shouka, a diferencia de su té, era excepcionalmente efectiva. Era el calor que la abrigaba hasta las puntas de los dedos. Además, el té era mucho más desagradable, así que fácilmente podía comer esto. Sin embargo, la sensación que ella tenía era la de estar acostada sobre una cama de clavos. ¿Por qué Shouka no le había preguntado nada? Mientras un sudor frío le recorría la espalda, Shusui tragó el último resto de la sopa. –Ahí viene.
Pensándolo bien, él realmente era implacable.

“-Ahora te preguntaré, ¿cuál es tu excusa para romper tu promesa de no volver a usar tus poderes?”

¿Excusa?

Shusui recordó los días posteriores a la partida de Shuurei. Ryuuki-sama difícilmente había hablado o dormido. Shouka-sama empezó a vivir en los archivos, esperando la llegada de noticias de la Provincia Sa. Pese a que éste sólo era un caso de una extraña enfermedad, la familia Hyou había aparecido, y ellos habían encontrado a Shuurei, Riou-sama había localizado a Shusui, su pasado había sido expuesto y Reishin-sama le había puesto un guardia personal-

Shusui, quien tenía todo esto pesando sobre ella, se quedó sin una sola excusa.

“¡Y-yo! ¿No puedo preocuparme por Shuurei-sama? Riou-sama de algún modo me encontró recientemente. En este momento, da lo mismo si los uso o no. Mejor dicho, si puedo usarlos, los usaré. ¡Me purifiqué a mí misma para evitar morir! Y el oponente es…”

Shusui, que ahora estaba tan exaltada y se había levantado, se hundió al tiempo que pronunciaba la siguiente frase titubeando.

“… la familia Hyou.”

Shouka palmeó la cabeza de Shusui, que ahora estaba inclinada como la de un niño.

“Siento haberte hecho disgustar.”

Ante su delicada voz, Shusui hizo un ruido proveniente de algún lugar dentro de su garganta.
Ella verdaderamente entendía. Lo que había hecho sólo había sido por una imprudente autosatisfacción. Si ella hubiera esperado, habría obtenido la información, sin lugar a dudas. Antes de eso, incluso si Shusui hubiera visto, todo eso carecería de sentido.

Simplemente no pudo evitar intervenir. Ella recordó el pasado. Había estado ansiosa, asustada, así que tan sólo para sentirse bien, no queriendo preocuparse, ella había actuado imprudentemente.

Incluso sabiendo eso, Shouka no la culpó.
“… Lo siento.”
“Si algo te hubiera pasado, Shuurei estaría triste. Ryuuki-sama estaría conmocionado. Desde que Shuurei se fue, tú has sido quien lo ha apoyado a él y a la Residencia Imperial. No olvides esto. Ahora eres indispensable para mucha gente.”

Shusui cerró los ojos, y escuchó su voz.
“… Si.”
“Eres una buena niña. Toma, te daré algunos dulces.”

Aunque realmente estaba siendo tratada como una niña, Shusui seguía estando feliz. Entonces, nerviosamente y jugando con la taza vacía, se atrevió a preguntar algo.

“… Uh… sobre lo que dijiste antes… si algo me hubiera ocurrido, entonces Shouka-sama…”
“Los habría matado y tirado al río.”

Shouka lanzó el dulce que había tomado de la caja, y éste aterrizó directamente en la boca de Shusui.

“Mi esposa definitivamente habría hecho carne seca con ellos, y Hokuto los habría freído, así que yo soy el más considerado.”

El dulce de azúcar se derritió en su boca, esparciendo su dulzura en ella.
Desde que ella sabía que era amada, era feliz. Shusui sonrió como un niño. Pero, de repente se dio cuenta de algo. Miró hacia abajo y notó su estado actual. Entonces, como para ver si esas ropas eran unas que no recordaba haberse puesto, ella discretamente jaló y tocó su manga.

“¿Shusui? ¿Tienes un insecto?”
“… Uh… mi ropa.”
“Aah, si te hubiera dejado como estabas, te habrías congelado, así que hice que te cambiaran la ropa. Desde luego, habría estado mal que yo lo hiciera, así que le dije a Reishin-“
“¡¡¡!!!”

Shusui palideció. ¡¿Acaso el había?!

“’¿Puedes llamar a una mujer para que venga aquí en secreto y le cambie la ropa? ¿Y también puedes pedir que traigan aquí un conjunto de ropa para dama de compañía, para que se la pongan?’ A veces es bueno tener un hermano menor con un rango tan alto.”

Shusui estaba tan aliviada que se desplomó directamente sobre el escritorio. Esto era malo para su corazón…

“Ah, ¿Habría sido mejor que llamara al General Ran?”

Shusui saltó.

“¡Ni siquiera bromees con eso! ¡No puedo asegurar que no lo masacraría a propósito!
“… ¿Huh?”
“Si. Lo haría en escabeche.”

Shouka puso una mano en su mandíbula.
“Hmmm. Él es tan suave con las mujeres que puede que sea un buen partido. Si hay un hombre que sea capaz de sobrevivir a una riña contigo, ése sería el General Ran.”
“¡Shouka-sama! ¡Estás malinterpretando las cosas!”

Shusui dio una ruidosa palmada en la mesa. Aunque ella sabía que cada vez que echaba a esa especie de condenada sabandija afuera de la Residencia Imperial, los rumores empezaban a circular, ¿como es que hasta Shouka-sama-

Sin embargo, Shouka dejó de sonreír.

“Pero, aunque pueda ser necesario tener a un hombre tan destacado como el General Ran, no te entregaría a él tal y como es ahora.”
“…. ¿Eh?”

“¿Puedo darte una advertencia? Aunque solamente esté jugando, no hay un hombre que se pueda igualar al General Ran. Pero, no puedo dejar que un hombre que no es serio, te tenga.”

Aunque su cara estaba un poco perpleja, si se veía que hablaba en serio, parecía que no estaba bromeando.

Shusui estaba confundida. ¿Qué era toda esa situación? Que ése Shouka pudiera decirle esas cosas-

'¿Un sueño? Quizás esté soñando-'
“Uh… no. Um, estoy bien. Puedo deshacerme de él por mí misma.”
“Si realmente estás bien, dime… Shusui, ¿tienes fiebre? Tu cara está encendida.”

Shusui lloró en su corazón. Shuurei-sama definitivamente hizo que ella estuviera inconsciente de su padre.

“Hablando de Reishin-sama, parece que ha disminuido la vigilancia sobre mí.”
“Eso es porque tu imprudencia fue lo suficientemente tenaz para hacerlo desistir.”
“Lo siento de verdad.”
“Después de eso, deberías agradecerle a Shou Taishi por única vez. Sólo una vez. Una vez. Porque sólo fue una vez.”

Parecía que él quiso decir ‘no lo hagas’. Shusui pensó que más tarde agradecería a Shou Taishi discretamente.

“Entonces, gracias por preocuparte por Shuurei y por mí.”

Shusui no supo qué decir, así que empezó a levantar los vasos de la mesa, sin sentido. Ella fue a servir el té, pero Shouka puso su mano encima de la tetera.

“Si quieres té, yo lo serviré.”

Shusui le dio un vistazo a su té con una sonrisa como si fuera a enfrentar la muerte.

(Él es tan capaz en su trabajo que puede hacer cualquier cosa pero, ¿por qué…)

Ella sabía que esto no era una actuación, así que el misterio simplemente se agudizó.

Shouka miró cuidadosamente a Shusui.

“… Cuando te veo, recuerdo a Hokuto.”
“¿Eh?”
“No, al principio, tú estabas muy asustada, así que él dijo que no te tocáramos. Cuando le pedimos que jugara contigo, él cambió de opinión y vino corriendo. ‘Oye, espera, ¿a que estamos jugando? ¿Qué tal si hacemos volar su cabeza? ¿No sería divertido?’ dijo él, sinceramente descontento. Qué idiota.”

“Yo lloré…”

Una cabeza volando. Era demasiado aterrador. Pero en realidad, Hokuto era quien más cuidaba a Shusui.

“Es gracias a ti que Hokuto adoptó a Shourin-kun y su hermano, y los crió.”

De repente, Shusui levantó la cabeza de su taza con el té de Shouka. Era raro que Shouka hablara del pasado.

“Debes haber estado hablando de los viejos tiempos con Reishin-sama.”

Pese a que él no tenía intención de que ella escuchara eso, a esa distancia, Shusui inconscientemente lo captó.

En alguna parte, se escuchó el trinar de un ave. Había amanecido.
Fue en ese momento cuando él se sumergió en la oscuridad antes del amanecer.

“Es verdad… en ese momento, parecía impensable que el anterior ‘Lobo Negro’ o su Majestad, el emperador previo, murieran. Tratándose de ellos, era como si incluso si los mataban, ellos no morirían.”
“El anterior Lobo Negro…”
“Si… ahora, quedan pocos que conocieron a esa persona. Ni siquiera Hokuto la conoció…”

La mensajera de la muerte, en la oscuridad del campo de batalla, bañada en la lluvia carmesí. Ella había estado al lado del soberano antes de su coronación.

Incluso ahora, Shouka… pensaba en ella.

“Increíble… eres demasiado capaz. Este no es momento para que vivas simplemente como un suertudo jovencito noble. Es por eso que Senka puso sus ojos en ti.”

Esta sonriente persona miró a Shouka con vivaces ojos que eran como una noche clara de verano.

“Ah, Senka, ya lo decidí. Elijo a este niño. Así que no lo mataré.”

¿Y si esa persona siguiera viva?

“¿No es Senka un idiota? A veces él realmente no sabe lo que hace, así que cuando yo no esté cerca, vigila la situación. No confío en Shou Taishi.”

… El emperador anterior podía haber cambiado. Si esa persona hubiera estado con él, quizás él no hubiera sido conocido hasta el final, como un sangriento conquistador.

“¿Qué clase de persona era ella?”

Ante las inocentes palabras de Shusui, el aliento de Shouka se atoró por un segundo en su garganta.

El tiempo que ellos pasaron juntos, había sido poco más de un año.

Verdaderamente, ella había sido más fuerte que cualquiera. Es por eso que Shouka no dudó que el día en que esa persona sería asesinada, definitivamente llegaría.

“Chico, ¿tú tienes alguien importante a quien quieres proteger? ¿Tan importante que incluso podrías matar gente por ellos?”

Si los tengo, fue su respuesta, y luego ella se volteó hacia él con ojos severos.

“¿En serio? Sólo debes matar por tu propio bien. No uses a aquellos que son importantes para ti, ni a nadie más, como una excusa para matar. El único que caerá serás tú solo.”

Este corto, largo—pero inolvidable y vívido recuerdo, fue dejado dentro del corazón de Shouka.

Esa persona se había ido.

Antes de poder pensar en ello, estas palabras salieron de él.

“Esa persona fue la primera persona en mi vida que me dejó llorar.”

Y ya que esa persona no estaba aquí, ahora no había nadie como ella para Shouka.

***

“Voy a adivinar en qué estas pensando.”

Si él pensaba en eso ahora, era extraño que ella supiera todo, como lo hacía.

“Probablemente estás pensando ‘Como simplemente no puedo descubrir si soy una persona fría o afectuosa, no importa cuánto lo intente, nadie me puede entender, ni yo mismo’.”

El Lobo Negro sonrió tristemente, mirando la expresión de verdadera sorpresa de Shouka.

“Entonces, si no lo sabes, es inevitable.”
“… ¿Qué significa eso?”
“Bien, si sigues sin saberlo después de que hayan pasado treinta años, ¿puedo decírtelo?”

Por naturaleza, ella raras veces daba respuestas. Sin embargo.

“¿Puedo preguntarte algo?”
“No, está bien. Lo sé. –Él los mataría.”

Esa persona definitivamente no estaba mintiendo.

“Si tú no hubieras venido aquí, probablemente ustedes tres pronto serían asesinados.”
“¿También Kurou?”
“Si. Aún cuando ustedes son pequeños, sin lugar a dudas se llevan muy bien. Si ustedes tres no fueran asesinados de una vez, después habría problemas. Él dejaría que tu padre tuviera más hijos para conseguir un heredero.”

Shouka puso su mano en la frente. Él había pensado que aún en la peor situación, Kurou sería dejado con vida.

“… mi interpretación fue muy ingenua.”
“Eso no tiene nada que ver. No quedaban muchas opciones para ti, que eres un niño. Ya que pudiste sobrevivir después de conocer a ése horroroso idiota de Senka, ya es bastante proeza. Lo hiciste bien.”

Shouka admiró el bello perfil del Lobo Negro. El Lobo Negro se arrodilló, hizo media reverencia con su cabeza y tomó la mano de Shouka. Ella sonrió aunque estaba llorando.

“… Gracias por venir conmigo. De ser posible, no quiero matar niños. Aún cuando ya quedan pocos niños… los adultos son idiotas, y por eso, los niños como tú pasan por dificultades.”

Ése día, por primera vez en su vida, Shouka se percató de que se había vuelto un ‘niño’.

***

“… una amable y tierna persona. Aunque es extraño que ella haya tenido que matar a más personas que cualquiera.”

La asesina más fuerte, quien usaba su espada por el beneficio del emperador. El revés de eso era que todo el deber de asesinar que recayó en esa persona. La persona que más anhelaba una época en la que no fuera necesario matar a nadie, era quien estaba más manchada de sangre que cualquiera, quien asesinaba a la gente.

“Ella disfrutaba los días despejados, miraba atentamente la noche estrellada, tiernamente sostenía un niño, consideraba los sentimientos de los demás, mantenía sus promesas.’…’Para que los demás no olvidaran cómo sonreír, ella sonreía aunque hubieran cosas tristes y dolorosas, encerrándolas en su pecho. Así era ella.”

Shouka no vio que la expresión de Shusui había cambiado repentinamente.

Para Shouka, los días que él paso al lado del Lobo Negro fueron misteriosos. Por primera vez, él estuvo rodeado por ‘adultos insuperables’, y a veces era tratado como un igual, y a veces como un niño.

“El emperador anterior era una clase de persona bastante excepcional. Aunque Seiran cree que se parece a su padre, ni siquiera se le acerca. Si él creía que alguien le estorbaba, los mataba a todos. Él era apuesto, extremadamente capaz, increíblemente inteligente, pero con muy mal carácter. Si el anterior Lobo Negro no lo hubiera sermoneado todo el tiempo y evitado que se saliera de control, tanto tú como yo, probablemente habríamos muerto incluso antes de nacer.”

“¿Él… él era esa clase de persona?”
“Así es. Tú no lo sabes porque desde que el emperador anterior murió, sólo has conocido a éste, ¿verdad?”
Ante su sonrisa, solitaria, y aún así a veces ligeramente teñida de alegría al recordar buenos tiempos, Shusui se movió para hablar.

“… Shouka-sama.”
“¿Mmm?”
“Realmente debe haberte gustado el anterior Lobo Negro.”

Shusui murmuró esto mientras miraba la bebida caliente.

“Lo mismo que era esa persona para ti, Shouka-sama es para mí.”

Shouka respiró y tosió ligeramente.

Incluso ahora, Shouka no se conocía a sí mismo. Ya habían pasado los 30 años prometidos, pero la persona que le diría la respuesta ya no estaba ahí.
Shouka, quien dijo muchas mentiras, no sabía qué era la ‘verdad’. Sin embargo, sabía que él era diferente de esa persona.

El anterior Lobo Negro nunca se sentaría ahí mientras su hija iba hacia el peligro.

… Él no había sido capaz de parecerse a esa persona.
“… Si, me gustaba esa persona.”

Él había querido ser como ella.

Ella había sido amable, severa, y por alguna razón, comprendía a Shouka mejor que él mismo.

A cambio de las vidas de sus hermanos, ella le había enseñado el arte de matar y lo educó como un asesino.

Conducta anormal, cruel e inhumana. En ninguna parte había justicia. Era imposible de justificar. Reishin incluso ahora la odiaba.

Pero Shouka sabía esto.

“Quiero ver el día, en que uno pueda apegarse a sus ideales.”

Esto era lo que el ‘Lobo Negro’, cuyos atroces y crueles actos eran temidos por todos, deseaba. En ocasiones, ella lloraba sola. Las garras de la guerra y el caos dejaron profundas cicatrices en los pueblos y en las calles, y esto afligió su corazón más que el de cualquiera. Suficientemente incluso para mover la metódica mente de Shouka.

Si, Shouka la había amado.

Ella había puesto muchos tesoros en sus manos, como si se desbordaran.

“Yo quería ser como esa persona.”

Así que, cuando ella murió, por su propia voluntad, eligió sucederla.

Mucho, mucho tiempo hacía, en el pasado distante.

“Comprendo lo que su Majestad está diciendo.”

Después de la desaparición del Lobo Negro, Shouka, quien había sido llamado ante el emperador, sin esperar a que se le ordenara, sonrió calmadamente.

“Haré esto: regresaré de inmediato con la familia Kou, y rápidamente mataré a mi tía abuela Gyokukan. –Me convertiré en el siguiente Lobo Negro.”

Shouka miró con profunda emoción a Shusui, quien había recogido su cabello y apareció de nuevo como la Dama de Compañía Principal.

“Ahora sin ti, la Residencia Imperial no puede funcionar.”

Shusui inclinó su cabeza, tratando de esconder su sonrojo. Entonces ella habló tranquilamente.

“… Su majestad...”
“¿Huh?”
“Él realmente ha resistido mucho.”

Fueron pocos los que vieron su soledad. Esto era porque, se pensaba debido a su posición, él podría tener cualquier cosa que deseara. Pero Shusui, luego de que Shuurei se convirtió en la consorte, finalmente entendió.

Después de que Shuurei dejó la Residencia Imperial, Shusui había visto pasar los días para el emperador. Poco a poco, él se había deteriorado. Pese a que él se esforzó, todos creyeron que esto era lo más natural porque él era el emperador. Ser espléndido era natural. Perseverar era natural. ¿Por qué? Porque era el emperador.

Shuurei, quien le había dado muchas ‘recompensas’, ya no estaba ahí. Los manjuus, el pañuelo de sakura, el sonido de su erhu, ‘has trabajado muy duro’, ‘muy bien’, ‘¿estás cansado?’-sonriendo, ella compensó las cosas de las que él carecía. Pero esa chica ya no estaba ahí.

Lo que Shusui podía hacer era muy poco.

“Bueno, esto es simplemente algo que he pensado, pero si tan sólo yo pudiera ayudarlo un poco…”
“… Si. Gracias.”

Shusui recordó a Hyou Riou. –Finalmente, su paradero había sido revelado a la familia Hyou.

“Ahora no sé cuánto tiempo podré quedarme en la Residencia Imperial…”
“Yo te protegeré”, prometió Shouka.

“No permitiré que el clan Hyou ponga sus manos sobre ti. Se lo prometí a mi esposa. Y también mantendré la parte de la promesa que le correspondía a Hokuto.”

Por un segundo, una sonrisa llorosa destelló en la cara de Shusui. Realmente, la persona a quien él amaba, siempre sería únicamente esa persona.

(Pero, está bien.)

Shusui amaba a Shouka, a la mujer a la que Shouka había amado, y a Shuurei, quien había nacido de su unión.

“Gracias, Shouka-sama. Esas solas palabras son suficientes.”

Ya que sabía que era apreciada, Shusui podía creer que cualquier cosa que ellos dijeran, sería suficiente. Shusui, quien había sido ‘impotente’, era feliz sólo al ser amada por alguien.

“-Está bien. Puedo luchar.”

Entonces, Shusui escuchó el sonido de unos pasos familiares. Por supuesto, Shouka también.

“Oho, es el General Ran. Justo a tiempo, él puede acompañarte a la Residencia Imperial.”

Shusui se dio la vuelta instantáneamente, y sin despedirse, despegó como si estuviera volando. Como se esperaba del General Ran, ahí estaba su voz, gritando mientras la perseguía en cuanto la vio delante de él. Ya que eso había pasado, Shusui, como estaba en su estado ‘normal’, era la más débil.

(Qué velocidad tan impresionante. Ella ha aprendido algunas técnicas. Pero el General Ran tampoco se queda atrás.)

Escuchando la lejana conversación, Shouka sonrió involuntariamente.

“Es bueno ser joven, ¿No lo crees, Kai Yu-sama?”

Ante las palabras de Shouka, Kai Yu entró en los archivos por otra puerta y vio al chico que había heredado el título de “Lobo Negro” a su corta edad.

Entonces, el joven que había conocido a la mujer de su destino, luego de un corto tiempo, la perdió-

“Todavía eres suficientemente joven, haz un poco más de conciencia sobre eso, Shouka. ¿Por qué pones esa cara?”

Cuando él vio a Kai Yu, Shouka no pudo evitar recordar al anterior Lobo Negro.

“Kai Yu-sama…”

Ahora, ahí estaba alguien que conocía tanto al fallecido Lobo Negro, como a él.
Así que, especialmente, sin pensar, las palabras salieron de él.

“… Si esa persona… hubiera vivido…”

Dentro de los impasibles y vidriosos ojos de Shouka, había una persona que no debía haberse perdido. Alguien que él pensaba que no podía morir. La primera vez que él pudo imaginar la eternidad, fue en ese momento.

“Detente.”

Kai Yu golpeó levemente la mejilla de Shouka.

“Si ella hubiera vivido, habría hecho que Bara-hime diera su último respiro antes de que tú la hubieras conocido.”

La garganta de Shouka tembló.

Si… Era tal como lo decía. Ki-hime había sido asesinada por la familia Hyou cuando ella fracasó al matar a Bara-hime. Y a causa de que ella había sido asesinada, Shouka la había sucedido como el Lobo Negro, pasó 10 años puliendo sus habilidades, y conoció a su esposa, cuando intentaba matarla.

Él amaba a su esposa más que a nadie en el mundo. Antes él había conocido esa mirada, semejante a un luminoso…

“¿Estás llorando…? Estaba preocupado porque aunque siempre sonríes, nunca lloras, pero ahora estoy un poco aliviado…”

Cuando el anterior Lobo Negro dio su último respiro, Shouka, por primera vez en su vida, lloró por alguien más.

En ese momento, por supuesto que había odiado a ‘Bara-hime’ desde el fondo de su corazón. Él pensó que algún día, definitivamente la mataría. Y por eso, Shouka se había convertido en un experto asesino.

Hasta el momento en que pudiera enfrentar directamente a “Bara-hime”, como el segundo asesino encubierto.

… Entonces, con su muerte, el futuro de otro hombre se había salido de curso.

El cruel y asesino conquistador manchado de sangre. En su corazón sólo hubo una persona, una mujer que colgaba ahí como la luna en el cielo, y cuando él la perdió, el emperador nunca volvió a amar a nadie más.

Si Shouka no hubiera conocido a “Bara-hime”, entonces Shuurei no habría nacido. Sin embargo, si ella hubiera vivido, entonces quizás el emperador hubiera llegado a amar a alguien aparte de ella, y Ryuuki y Seiran no se habrían separado---

“Senka… promete… ser un buen gobernante… un país donde… los niños… no tengan que llorar…”

Después de eso, el emperador se sentó en el trono solamente para cumplir esa promesa. Antes, él había sido un cruel monarca que sólo escuchaba con reticencia sus peticiones. Pero luego de que ella murió, ya no era necesario que él pusiera su corazón para mantener esa promesa. Era como si él estuviera poniendo desinteresadamente las piezas del juego en el tablero. Para deshacerse de los príncipes y las consortes en un santiamén, él ni siquiera dudó en involucrar al pueblo. Él ni siquiera volteó a mirar a las consortes que realmente lo amaban.

Él fue despiadado, hasta el final.

Entonces, si ella hubiera vivido…

“¿Estabas enamorado de ella, Kaito?”

Ante esas palabras, Shouka sonrió de manera estresada.

No había sido un amor romántico. Shouka era un niño, y ella una adulta. El sentimiento de adoración era similar al que se tiene por una hermana mayor.

(Y el emperador estaba ahí como un perro guardián a las puertas del infierno…)

Pero, ¿desde cuándo? Por primera vez él había llorado por alguien más, cuando el día en el que conocería el nombre del pálido sentimiento de tener roto el corazón en mil pedazos, había llegado.

Quizás fue entonces cuando él pensó que trabajaría duro, hasta que pudiera incluso arreglárselas para cruzar espadas con el más fuerte, el emperador Senka, por tres días y tres noches. Ahora, todos esos ‘¿qué pasaría si…?’ carecían de significado.

“… Kaito, por favor ve con Ryuuki-sama. Parece que no puede dormir.”

Shouka asintió a las palabras de Kai Yu… Verdaderamente, hoy él no era él mismo.

“… Kaito.”
“¿Si?”
“Ka Shin-dono vino a verme. Me dejó un mensaje para ti.”

Kai Yu, discretamente le pasó el mensaje.

“Él dijo, ‘después de esto, te lo dejo a ti’.”

Shouka cerró los ojos, y en seguida, sin palabras, puso su mano sobre ellos.

“… siempre me abandonan.”

Shouka y el chico, que era un poco más joven que él, se habían conocido en el campo de batalla. Pero eran totalmente opuestos. Shouka mataba, y el salvaba vidas. Él recordó su sonrisa, semejante a un sol.

“Kai Yu-dono… ¿él era amable?”

Él pensó que tratándose de amabilidad, de inmediato lo señalaría a él. Comparado con Ka Shin, su propia amabilidad era una farsa.

“No te conoces a ti mismo.”
Cuando él alzó la cabeza, por un segundo, sus facciones aparecieron sobre el rostro de Kai Yu.

“Conozco la respuesta a eso, pero probablemente tú no. Pero, no te la diré. ‘Hasta que la sepas, no debes venir aquí’, eso dijo él.”

Shouka pasó una mano por su cabello, y suspiró.

“Bueno, al menos sé que soy una persona fría.”

Aún cuando él conocía el estilo de vida de Ka Shin, Shouka no cambió. Él no se echó para atrás. Él mismo eligió seguir recorriendo ese camino.

Sin importar lo que dijeran los demás, Shouka mismo sabía que él poseía la oscuridad y sangre fría que le permitía matar a otros.

***

“Kai Yu-dono… el mayor problema de Kaito es que el alcance de lo que hace es demasiado amplio.”

Un día, Ki-hime le dijo esto a Kai Yu.

“Así que es natural que él no sepa qué clase de persona es. Porque él mismo es tan amplio, que no puede engancharse a sí mismo.”

‘Tu té es terrible’, se quejó Ki-hime.

“El té que hace Kaito es excesiva e increíblemente amargo. Si lo analizas, verás que en él hay un montón de hierbas medicinales. Él dijo, ‘El té ya es amargo, así que aunque le ponga esto, la gente no lo notará. Esto es asombroso, porque si tomas una copa, tendrás energía por el resto del día, y tampoco necesitarás comer. Es un té herbal especial.’ Por supuesto, normalmente ese chico sería el más cabal de la historia. Si estuviéramos viviendo en tiempos de paz, definitivamente creo que pasaría el resto de su vida placenteramente leyendo sus libros favoritos en los archivos, sin darse cuenta de que su ‘té herbal’ hace que la gente se desmaye, pensando que es bueno servírselos.”

Ella entendía al verdadero Shouka.

“Por su propio bien, él dejaría que las cosas empeoraran por su pereza, y no le importaría en lo absoluto beber un mal té, pero por sus hermanos, él mataría. Si bien él puede hacer lo que sea, si fuera por él mismo, él estaría conforme con cualquier cosa. Por eso, ese niño no se da cuenta de que es amable.”

No mueras, ella lloró.

“Ese niño es demasiado apropiado para ser el ‘Lobo Negro’. Pensé en elegir un sucesor, sólo por si acaso, pero lo hice mejor de lo que esperaba. Aunque pensaba que conseguiría un chico idiota, arrogante, efímero y desafortunado, Senka me presionó… Así, tarde o temprano, todos confiarán en Kaito… No, eso no es verdad-
Si mato a Bara-hime pronto, después de eso, de alguna manera, yo sola puedo…”

… Poco después de eso, ella murió.

Eso era algo que Shouka no necesitaba saber.

Shouka había dicho ‘Y si…’. ¿Y si ella hubiera vivido? Kai Yu mismo también se lo preguntaba.

La mujer que había conocido a Shouka mejor que él mismo, una persona singular que podía proteger a otros. Si ella hubiera estado con Shouka un poco más, probablemente algo sería diferente dentro de él.

El chico que heredó el título del ‘Lobo Negro’ se había encargado bien de todo. Matando sólo cuando era necesario, él estabilizó el régimen, y poco a poco, los ‘Lobos del Viento’ fueron disueltos.

El chico que había asumido completamente la oscuridad con maestría, incluso ahora pensaba en sí mismo como una persona ‘fría’.

“Sin embargo, Kai Yu-sama… si algún día él tiene la libertad para mirar a su alrededor, ese niño definitivamente se dará cuenta. Quiero que él lo vea por sí mismo, así que hasta entonces, por favor, no le digas.”

Alrededor de Shouka, quien tenía un alcance anormalmente amplio, definitivamente habrían muchos que le adorarían.

No se puede engañar a otros con una falsa amabilidad por siempre.

¿Qué clase de persona era él?

Si el mundo se volviera de tal forma que él pudiera mirar detenidamente a su alrededor, entonces seguramente…

La gente a su alrededor se lo diría.

Kai Yu cerró sus ojos, pensando en la hermosa dama que continuamente ensuciaba sus manos, desde su niñez, por el emperador y el país.

… Por alguna razón, Shouka había sido abandonado. Ki-hime, Hokuto, Ka Shin, “Bara-hime”, y el emperador anterior… todos los ‘adultos’ quienes estuvieron por encima de él, habían muerto uno tras otro, dejándolo solo.

Así que, si Kai Yu pudiera él mismo, sólo un poco más…'

CONTINÚA

Fuente: http://yuzutea.net/log/2009/04/otogibanashi-part-4/
Fuente: http://yuzutea.net/log/2009/04/otogibanashi-part-5/

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